Para saber si el cuello es armónico al rostro, observamos la línea descendente que
va desde el “rabillo” exterior del ojo hasta el cuello. El grosor del cuello ha
de ser igual (aproximadamente) a la distancia que existe entre los cantos laterales de los ojos.
La longitud y el grosor del cuello es un rasgo muy importante a la hora de optar por un estilo o largo del cabello.
Se pueden distinguir cuatro tipos de cuellos:
LARGO Y DELGADO
Se opta tanto por el cabello corto como por el largo, y se tendrá que cubrir los laterales.
Le favorecen las medias melenas rectas en la mitad de su longitud.
Los cabellos cortos acentúan su delgadez .
Si el cabello es corto, será recomendable un corte en línea de forma cuadrada en la nuca.
CORTO Y GRUESO
Tiene menos altura de lo normal y su base es tan ancha como la cabeza.
En el caso de un cuello corto es conveniente llevar el cabello por encima de la nuca.
Se puede compensar el corto del cuello dando mayor volumen en la zona alta de la cabeza, sobre todo cuando la persona no es muy alta.
Las medidas medias dan la sensación de cuello corto que las medidas largas.
Para disimulas la anchura se optara por desfilar las puntas hacia el cuello cubriéndolo.
Son recomendables las líneas alargadas en la nuca.
CORTO Y DELGADO
Cuello muy pequeño, tanto en anchura como en longitud.
En todos estos casos, conviene evitar el volumen y el espesor sobre esta zona en cabellos cortos pues acentuarían la percepción de delgadez.
Los cabellos largos no presentan muchos inconvenientes.
LARGO Y GRUESO
Cuello grande, tanto en ancho como en largo.
En este caso se opta por dejar una mayor cantidad de cabello en la nuca, que será tan larga como nos permita el nacimiento del cabello, e incluso dejando más longitud.
